¿Sabes cuándo uno nota que va llegando a viejo? Cuando los amigos y allegados, con la sana intención de evitarte disgustos, procuran que no te enteres de acontecimientos luctuosos o desagradables. Será por eso por lo que no me dijeron que Pepe Repiso se había muerto hasta después de velado y enterrado.
Se murió el día 15 de agosto, justo la fecha que desde el año 1994 habíamos elegido un grupo de matrimonios amigos para reunirnos. Aunque estos últimos años Horacia y él ya no venían, siempre los echábamos de menos.
Pepe Repiso era para mí amigo, compañero, cómplice, confidente... He sentido su muerte con dolor y tristeza. De jóvenes éramos inseparables y luego hicimos muchos trabajos juntos en aventuras arqueológicas, periodísticas y recopilatorias de la historia de nuestro pueblo.
Pepe, como persona, era una mezcla del genio de las Juaícas, de la locura espontánea de los Repisos y del regusto por los tratos y por el dinero de los Canelos. Una buena persona a la que Horacia supo entender con mucho cariño.
Pepe Repiso, después de haber hecho muchas cosas (menos estudiar), se metió a fotógrafo y fue un excelente profesional. Este MURRE le debe la mitad de las fotografías que contiene. Pero antes de que él tuviera una cámara, yo ya tenía una Minolta y con ella nos hicimos algunas fotografías que aquí os muestro.
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| Es desde el cerro Bastián. Puse la cámara sobre una piedra, di al botón y salí corriendo. Ahí estamos. Ahí estábamos. |
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| Cerrillo de la arena |
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| Pepe en las alturas |
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| Haciendo el ganso con traje y corbata |
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| Horacia y Eloísa tras la reja |
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| Fumando en el Jardín. |
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| En el puente del Arroyo, foto obligada de todas las parejas. |
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Yo era el fotógrafo y no salgo. Pepe, Horacia y Eloísa en el brocal de un pozo que había en los Llanos. |
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| De paseo por la carretera. |
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| Antonia, Fátima y Pepe |
Estamos en Villa H el año 1997. Somo once parejas. Digo los nombres de izquierda a derecha. Paco y Rosi, Pepe, Eloísa, Paqui y Germán, Cristóbal y Paquita, Horacia, Rafalita y Joaquín, Paco Vilaret, Juanito y Mari, José Antonio y Adelina, Beli y Pepe Luis, yo y Eloísa Cano. Hay una chica que no identifico.
Estas reuniones se prolongaron durante más de veinte años. Bonitos e imborrables recuerdos.