sábado, 22 de febrero de 2014

92.- Mocitas con pañuelo

Como en los pueblos tenemos el campo tan cerca, a la más mínima se organiza una excursión, eso sí, siempre que haga buen tiempo. Por eso la primavera está llena de fiestas campestres: san Marcos, san Isidro, san Juan, la romería de la Virgen... En ocasiones la simple excusa de ir por agua al Nacimiento o al Toronjil sirve para darse un garbeo por esos campos de Dios. Las fotos que vienen a continuación son instantáneas tomadas en el campo y en las que las mocitas lucen un pañuelo de colores aunque en las fotografías en blanco y negro estos colorines no se noten.

¿De dónde viene esa manía que tienen algunas religiones por taparles el pelo a las mujeres? La explicación es muy sencilla: una mujer con el pelo suelto, con la melena al aire, con la mata de pelo cayendo sobre los hombres, ha sido siempre una imagen sensual, provocativa, sexy, y eso los hombres no lo podían consentir sobre todo si la desmelenada era su hija o su mujer.

Total, a lo que íbamos: cuando las mocitas de nuestro pueblo salían al campo, una de las prendas indispensables era un pañuelo que recogía el pelo y que se ceñía a la cara hiciera solano o no. Como muestra de esta costumbre felizmente superada, he aquí una cuantas imágenes en las que damos testimonio de lo dicho.

Del velo que las mujeres habían de ponerse al entrar en la iglesia hablaremos en el apartado correspondiente.

Uno de los dos hombres que aparecen en esta imagen idílica de hierba y verdor es nuestro buen amigo el 'Práctico'.

En esta imagen las mocitas, mujeres y niños descansan sobre un lecho de taramas de olivo. Para hacernos una idea de cuándo se hizo lo foto, la chica que aparece en el centro y en primer plano es la Elisa de doña Enriqueta.

Más mocitas y mocitos revoleados por el suelo; Hay que hacer notar el cuidado recato con que las mujeres esconden las partes sensibles de ser vistas utilizando los múltiples pliegues de su falda de colorines. Solo se les ve la cara y los ojos, y algunas los disimulan con gafas oscuras. ¡Qué tiempos!

Lo de los pañuelos y las gafas viene de antiguo. Esta foto, a la fecha de hoy, ha de tener por lo menos ochenta años y ya andaban las mocitas con gafas y pañuelos y faldas que lo tapaban todo. La mujer de oscuro de la derecha es la esposa de Pepe Nateras, la madre de Alejandro que en paz descanse.

La simetría en esta imagen campestre es casi perfecta: las mujeres a la izquierda, los hombres a la derecha. Juntos pero no revueltos. Hay un refrán que avisa de los peligros de las promiscuidades en esos días de campo: "Quien sanjuanea, marcea", justo a los nueve meses.

Imagen curiosa: un niño que llora; la madre (Pepe de Carmen de Benede) que insiste en que mire a la cámara; alguien que come sin atender al fotógrafo (mi hermana): una niña que se admira de algo (mi sobrina Maribel); uno (yo) que quiere salir en la foto; una mocita con felpa y mirar atento (Eloísa), alguien que da la espalda; uno con sombrero que tiende la mano (Pepe Repiso)... y en el centro, sobre un mantel, la comida que nos espera.

Faldas de colorines, gafas para ojos de chinas, collares, piernas pudorosamente recogidas y el pañuelo que tapa y embellece y resalta la cara feliz de estas mocitas.

Las de la derecha eran dos solteras, las Caleras, que han ido de san Marcos con la Antoñilla y un hijo de Rafael Castillo.

Romería de san José camino del Cerro Limón en un día de fuerte solanera. Los del centro son Torres y Carmen la Herrera.

De vuelta de un sanmarcos, Pepe Herrero se ha puesto el pañuelo de su mujer Herminia. Así venía.

Idílica imagen en plena naturaleza con el uniforme de san Marcos: zapatillas, falda floreada, rebeca por lo del relente y pañuelo ceñido. Los dos hombres del fondo forman parte del decorado.
Ellas son Isabelita de la Fabriquilla y Encarnita de Juanico la Bigota.

Mocitas (Pilar de Cristóbal el Sordo, Hipólita de Gazpirre...) haciendo como que beben  en la Fuente de la Yedra. El que se asoma es un Caracol. Hay un revuelo de faldas junto al camión en el que ha venido el personal fiestero.

Cuatro mocitas con sus respectivos pañuelos sentadas en el parachoques de un venerable coche cerca de la Fuente de la Yedra. El niño que sonríe en primer plano es Pepe el marido de Sergia, El chófer es un Chiquitín.
Las mocitas son: Magdalena de Molinilla, Rosarito del sacristán, María de Feodoble, Anamari, nieta del sacristán

3 comentarios:

  1. Hola paisanos como siempre bonitas fotos,el día de San Marcos que bien que se pasaba ,la foto que estáis merendando en el campo ,el niño que llora es mi hermano Pepe y la madre que insiste que mire a la cámara ,es mi madre ,cuantos años han pasado.Tengo un amigo que se llama Marcos,yo siempre que le llamo le digo 25 de Abril y se ríe.Bueno hasta otro día un saludo para todos.

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  2. Que bonitas fotos Francisco . Muchas gracias por compartirlos con todo el grupo. Esta foto final, con estas cuatro mujeres guapísimas y el conductor del coche es mi tío Manuel . Pues le decían el chiquitín. También muy guapo . Soy Maria , su sobrina .

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  3. Gracias por leer y ver el murre nuestro de cada día. Seguro que guardas alguna foto que te gustaría compartir. Lo digo porque a la gente lo que le gusta es verse en otros tiempos que, curiosamente, a todos nos resultan más felices.
    Un saludo y gracias.

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