Nuestro buen amigo y paisano, Pepe Repiso, en sus tiempos de fotógrafo aprovechaba cualquier acontecimiento en el que se juntasen grupos de personas (toros, procesiones, bailes, elecciones de reinas...) para disparar la cámara y aumentar así el número de presuntos compradores de los retratos. El caso es que de aquellas fotos, aunque su madre la Antonia se empeñase pegarlas en el cristal del escaparate para que la gente se viera, no se vendieron muchas; forman parte del fondo documental que Pepe guarda en varias pañiles y del que de vez en cuando pongo aquí una muestra.
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| Ala izquierda estamos Eloísa y yo, partidos de la risa. |
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| ¿Qué es lo que pinta ese cajón con ruedas en medio de la plaza? |
Bonita plaza de toros y la plaza estaba abarrota , he reconocido muchos paisanos entre ellos al autor del blog ,que grande eres primo ,sigue así ,para que cada día nuestro pueblo sea conocido en mas sitios.Un fuerte abrazo.
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