Antes de que se inaugurase el edificio de usos múltiples, los espacios más amplios para celebrar eventos multitudinarios (más de cien personas) eran el salón de Rafalito y la galería de abajo del Grupo Escolar. No existían discotecas, ni la Ulisis, ni la Ovilis, ni La Poli, ni siquiera El Ventorro. Mucho menos, Paneque.
En el Grupo Escolar (actual Colegio Velasco Merino), en el edificio original sin tantos añadidos, había dos plantas: la de arriba era para las niñas y la de abajo para los niños. La galería de abajo era más segura y accesible y en ella se celebraron numerosos actos (políticos, económicos, comerciales) y, al final, se daba una copa de vino español: vino, cervezas, refrescos para las mujeres, acompañados de platos con mortadela, queso, jamón y otras exquisiteses.
También se hicieron desfiles carnavalescos (estos ya con alumnos) de los que dejaron constancia los fotógrafos del pueblo. A mí sólo me han llegado las fotografías de Pepe Repiso.
Hoy voy a poner su tarjeta de fotógrafo.
Son la perra de Alpargatas y el gato de la Gertrudis saludándose en los adoquines.
Fotos de hoy: niños y niñas en la galería de abajo disfrazados de distintos modelos.
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